¡Doble limpieza facial! ¿Qué es y cómo hacerla?

La doble limpieza facial se ha convertido en un must del cuidado de la piel, ¡y no es para menos! Este método, que consiste en limpiar el rostro en dos simples pasos, es la clave para mantener la piel cuidada y con ese brillo natural que tanto nos encanta. Si estás buscando un ritual para lograr una piel fresca, limpia y saludable, este puede ser el secreto que te faltaba. ¿Te animas a intentarlo? En Pomys te contamos todo lo que necesitas saber para que tu piel luzca radiante.

¿Qué aspectos hay que tener en cuenta para la doble limpieza?

Antes de empezar a hacer la doble limpieza, hay algunos aspectos clave que debes considerar:

• Tipo de piel: conocer tu tipo de piel es esencial para elegir los productos adecuados. No es lo mismo una piel grasa que una seca o sensible; con nuestro test “¿Qué tipo de piel soy?” Podrás descubrir la tuya. ¡Recuerda que cada tipo de piel necesita cuidados específicos!

• Productos adecuados: la doble limpieza se basa en dos tipos de limpiadores: uno de textura más fluida para retirar el maquillaje y los productos tópicos más visibles y, otro limpiador como un gel que se encargará de retirar hasta los residuos más difíciles. ¡Ambos deben ser suaves y efectivos! Sin ingredientes agresivos y especializados para la piel de la cara.

Frecuencia: aunque es beneficioso, la doble limpieza no es necesaria dos veces al día para todos. La mayoría de las personas pueden hacerlo solo por la noche, cuando la piel ha acumulado más suciedad y grasa; aunque, recuerda que el lavado facial en la mañana también es indispensable para retirar el sudor que se acumuló durante la noche y los productos que skincare que te aplicaste antes de ir a dormir.

Beneficios de la doble limpieza facial

¡La doble limpieza no es solo una moda! Es un método comprobado con varios beneficios:

• Elimina eficazmente el maquillaje y la protección solar: los limpiadores iniciales, como las aguas micelares, son ideales para descomponer el maquillaje y los restos de protector solar, dejando la piel libre de impurezas.

• Limpia los poros a profundidad: el segundo paso, con un jabón en gel, elimina el sudor, la suciedad y otros residuos, logrando una limpieza profunda sin resecar la piel.

• Mejora la absorción de los productos: con la piel limpia y libre de impurezas, los productos que uses después (como serums o cremas) penetran mejor, maximizando sus beneficios.

• Reduce la obstrucción de poros: al mantener los poros libres de grasa y residuos, ayuda a prevenir brotes y puntos negros.

¿Quiénes necesitan la doble limpieza facial?

La doble limpieza no es solo para quienes usan maquillaje, recuerda que todos acumulamos grasa e impurezas durante el día, por eso, este método es especialmente beneficioso para:

• Personas con piel grasa: al eliminar el exceso de sebo en dos etapas, ayuda a equilibrar la piel y mantener los poros limpios.

• Personas expuestas a ambientes contaminados: si vives en una ciudad o trabajas en un ambiente con mucha contaminación, la doble limpieza es una excelente opción para eliminar las partículas que se acumulan en la piel.

Además, como ya lo sabes, la protección solar es un tema de todos los días; y sus componentes hacen que sea un producto difícil de retirar, por eso, si lo quisieras, para una limpieza completa y más profunda, podrías hacer de vez en cuando una doble limpieza.

¿La doble limpieza facial ayuda con los problemas de acné?

¡Sí! La doble limpieza es muy útil para quienes tienen acné o piel propensa a los brotes. Al eliminar la suciedad y el sebo acumulado, reduce la posibilidad de que los poros se obstruyan, que es una de las principales causas de acné; sin embargo, es importante usar productos suaves y específicos para pieles sensibles, evitando cualquier limpiador que sea demasiado agresivo o reseque en exceso.

Recuerda siempre consultar a tu dermatóloga para que te indique qué es lo mejor para tu piel.

¿Cuándo debo hacer la doble limpieza facial?

La doble limpieza es especialmente útil en la rutina de noche, ya que durante el día acumulamos más impurezas, grasa y restos de productos. En la mañana es recomendable lavar tu cara en la ducha con un producto especializado; ¡las reglas las pones tú!

Primer paso de la doble limpieza facial

Limpiador ligero: el primer paso es usar un limpiador ligero como el Agua Micelar de Rosas Pomys. Aplica la cantidad necesaria en una ruedita facial y aplica sobre el rostro seco; esto disolverá el maquillaje, el protector solar y el exceso de grasa.

Segundo paso de la doble limpieza facial

Limpiador en gel: sin necesidad de enjuagar el agua micelar, aplica en tus manos humedecidas un poco del Gel Limpiador Facial Pomys, crea un poco de espuma y después aplícalo en el rostro; masajea suavemente y enjuaga con agua fría.

Tercer paso de la doble limpieza facial

Secado suave: seca tu rostro con una toalla limpia, dando toques suaves, ¡sin frotar! Esto evitará irritaciones y prepara la piel para los siguientes pasos de tu rutina.

Errores comunes en la doble limpieza facial

Como todo en la vida, ¡la doble limpieza tiene sus trucos! Evita estos errores para no comprometer la salud de tu piel y para que puedas maximizar sus beneficios:

• Usar productos demasiado agresivos: algunos limpiadores pueden resecar la piel, por eso te recomendamos que busques fórmulas suaves y sin ingredientes irritantes, en productos que sean especializados para la piel.

• Frotar demasiado fuerte: la piel del rostro es delicada, por eso, debes evitar frotar con fuerza al masajear los limpiadores para no causar enrojecimiento o irritación.

• Hacer la doble limpieza más de lo necesario: si bien es beneficiosa, no es necesario hacerla varias veces al día; para la mayoría, una vez por la noche es más que suficiente.

Disfruta de un rostro radiante y bien cuidado con los mejores trucos del mundo de la belleza y, por supuesto, con productos que protejan tu piel para que no solo luzca, sino que se sienta increíble. ¿Estás lista para practicar la doble limpieza facial?